La pandemia ha modificado las preferencias del consumidor y los prestadores de servicios turísticos tienen que adaptarse a la nueva normalidad. El mundo entero atraviesa una baja en la masificación de destinos, sin embargo, cada país está experimentando un incremento en el flujo de visitantes a nivel nacional.
Uruguay sigue esta tendencia y el turismo interno o local se ha empezado a revalorizar. Las staycations (vacaciones en casa o a pocos kilómetros) ya no son una alternativa de viaje sino que son las protagonistas en la nueva pauta de consumo. Desde OP queremos informarte acerca de algunas tendencias actuales y cómo éstas pueden darte una orientación para perfilar tu propuesta de valor.
1. Turismo sostenible
¿Tendencia o realidad? El respeto por el medio ambiente es clave porque el planeta necesita de nuestro cuidado más que nunca. Según la Organización Mundial de Turismo (OMT) “(...) los principios de sostenibilidad se refieren a los aspectos medioambiental, económico y sociocultural del desarrollo turístico, habiéndose de establecer un equilibrio adecuado entre esas tres dimensiones para garantizar su sostenibilidad a largo plazo”.
Según Booking, el 69% de los viajeros elegirá aquellas opciones de viajes más sostenibles e intentarán reducir la huella de carbono (en un 53%) durante sus vacaciones. El 63% de los viajeros evitará, también por cuestiones de sanidad, acudir a las atracciones más populares.
"“La clave estará en aquellos lugares que sepan reivindicar sus espacios más secretos.” Booking.com
Con el turismo sostenible se logra un aumento en la calidad de vida de la población local, un menor impacto negativo cultural y ambiental, experiencias turísticas de mayor calidad, mayor demanda, extensión de la temporada, y, por ende, más ingresos (Hosteltur, 2020). Las principales áreas de acción de las empresas para ser más sostenibles son:
Reducir la dependencia de los combustibles fósiles.
Uso de energías renovables o limpias.
Reducir el consumo de agua.
Reducir los desperdicios generados.
Asegurar que las comunidades locales se benefician del desarrollo turístico.
Respetar los derechos humanos.
Proteger los ecosistemas y su biodiversidad.
2. Turismo astronómico
Es aquel en el que se realizan actividades involucradas con el recurso natural del cielo o el espacio para dar un valor adicional a la propuesta turística. Para poder promocionar este tipo de turismo es necesario contar con una ubicación donde se observe el cielo despejado sin contaminación lumínica con guías especializados en el tema y por supuesto contar con los servicios para la estadía del turista. Dentro de las actividades que se pueden realizar están: acampar, visitar museos de astronomía, planetarios y observatorios, entre otras actividades lúdicas.
En Uruguay es una tendencia cada vez más frecuente entre los apasionados de la sostenibilidad. Cuenta con varios rincones que se destacan por la calidad de su cielo nocturno limpio, por ejemplo: Cabo Polonio, Laguna de Rocha o Villa Serrana, entre otros.
3. Turismo de bienestar o mindfulness
Es una rama directa del turismo de salud que tiene como finalidad alcanzar el bienestar físico, psicológico y espiritual. Se hace más popular debido a la difusión del concepto de mindfulness y a la conciencia que la sociedad adquiere acerca de la importancia de preservar la salud. Lo que el turista busca es vivir una experiencia auténtica que va más allá de comer, comprar o visitar un lugar.
Las actividades que están relacionadas a este tipo de turismo son: yoga, meditación, spa, terapias alternativas, bañarse en aguas termales, retiros espirituales junto a la realización de prácticas como el budismo, el hinduismo o las prácticas indígenas prehispánicas. Con el turismo de bienestar y mindfulness viajamos dos veces: un viaje consciente al destino y un viaje transformador a nuestro interior.
4. Turismo rural
Las actividades vinculadas con el aire libre son las preferidas por los turistas post-Covid. Según Booking, más de la mitad (el 56%) buscará experiencias rurales o que le permitan estar en contacto con la naturaleza. Estos viajes se realizan en el medio rural, en busca de relax y el disfrute del entorno, además de la práctica de actividades relacionadas con la zona. Como recomendación te compartimos que cualquier actividad productiva que desarrolles en un ámbito rural, puede trabajarse de tal manera que estimule la visita de personas.
5. Turismo slow
Significa tomarse unas vacaciones para apreciar mejor el destino turístico mediante una relación de respeto y acercamiento responsable, procurando el bienestar en cada momento del día. En este tipo de turismo se busca viajar con calma, por esta razón, se recomienda desconectar el teléfono móvil para disfrutar más de la experiencia y guardar los momentos para compartirlos después del viaje. Si en tu negocio estás buscando ofrecer una experiencia slow, ten en cuenta los siguientes intereses de los turistas para diseñar tu propuesta turística:
Les atrae conocer e interactuar con la comunidad local.
Proteger el medio ambiente.
Prefieren proveedores turísticos locales que tengan políticas de sostenibilidad.
Invierten su dinero en productos locales.
Les interesa explorar lugares del destino poco conocidos.
Recomendaciones
No es casualidad que los tipos de turismo en tendencia estén relacionados con la sostenibilidad de los destinos turísticos. Las marcas tienen que ser resilientes y atrevidas en su estrategia de marketing. La omnicanalidad es básica para conocer mejor al turista, generar una relación más emocional y ofrecerle experiencias más personalizadas.
Consejo OP: Creá y promocioná experiencias seguras. Por ejemplo, muchos turistas creen que la tecnología y la gestión de servicios a través del móvil aumenta su seguridad sanitaria.
¿Sabías de estos tipos de turismo? ¿Te animarías a cambiar tu propuesta turística para agregar alguna de estas actividades en tendencia? Nos gustaría conocer tu opinión. Te invitamos a que te suscribas para recibir más publicaciones como estas.
¡Hasta la próxima!
Vicky